PALABRA DE DIOS

Cuando llegó la hora, se sentó a la mesa y los apóstoles con él y les dijo:

—«Ardientemente he deseado comer esta Pascua con ustedes, antes de padecer, porque les digo que ya no la volveré a comer hasta que se cumpla en el reino de Dios».

  1. Y, tomando un cáliz, después de pronunciar la acción de gracias, dijo:

—«Tomen esto, repártanlo entre ustedes; porque les digo que no beberé desde ahora del fruto de la vid hasta que venga el reino de Dios».

  1. Y, tomando pan, después de pronunciar la acción de gracias, lo partió y se lo dio diciendo:

—«Esto es mi cuerpo, que se entrega por ustedes; hagan esto en memoria mía».

  1. Después de cenar, hizo lo mismo con el cáliz diciendo:

—«Este cáliz es la nueva alianza en mi sangre, que es derramada por ustedes».

—«Pero miren: la mano del que me entrega está conmigo, en la mesa. Porque el Hijo del hombre se va, según lo establecido; pero ¡ay de aquel hombre por quien es entregado!».

  1. Ellos empezaron a preguntarse unos a otros sobre quién de ellos podía ser el que iba a hacer eso. […]

Lc 22, 14 – 23, 56

REFLEXIÓN BREVE

Y después de todo lo vivido, lo celebrado, lo dudado y lo compartido dice Jesús: He deseado enormemente comer esta comida con ustedes antes de padecer. ¿Deseamos comer con Jesús? Como creyentes, cuando damos testimonio de Jesús ¿despertamos el deseo de comer con Él, de estar con Él, de creer en Él? ¿Arde nuestro corazón? Hoy nos deja uno de sus últimos mensajes “Yo estoy en medio de ustedes como el que sirve”. A lo largo de esta Cuaresma Jesús nos ha enseñado una nueva forma de vivir, de relacionarnos, una lógica que descoloca y desconcierta a la lógica humana, hoy nos enseña que la única forma de liderazgo es el servicio. ¿Cómo ejercemos nuestro liderazgo?

ORACIÓN

Señor, haz de mi corazón Tu nueva y eterna Jerusalén.

Entra en mi interior con Tu gloria y majestad.

Conduce Tus pasos al templo de mi corazón, y allí, derriba toda mentira, vanidad y egoísmo, toda soberbia, arrogancia y miseria que me separan de la verdadera esencia que habita en mí.

Torna sagrado este templo, por Tu Presencia, Tu Verbo y por Tu Corazón.

Que Tus Palabras encuentren eco en mi interior y, por los siglos de los siglos, resuenen en mi consciencia y se tornen Vida en mi vida.

Amén.

ENTRA EN TU INTERIOR

  • Deja entrar Jesús quiere en esta Semana Santa. Que habite en tu familia, tu comunidad educativa y eclesial.
  • ¿Cómo lo recibirán y como habitará sobretodo en sus corazones?

ORACIÓN FINAL

Jesús desea entrar en tu vida, en nuestra vida.

Dejémosle pasar.

En nuestro corazón quiere reposar, para desde ahí, entregarse a los demás. Hagámoslo realidad, como Dios quiere de nosotros.

¡Cuenta conmigo! quiere resonar, desde la mesa que compartimos.