CULTIVO DE LA ORACIÓN
PALABRA DE DIOS
En aquel tiempo dijo Jesús: «Pedid y se os dará; buscad y hallaréis; llamad y se os abrirá.
Porque todo el que pide recibe; el que busca, halla; y al llamar, se le abrirá.
¿O hay acaso alguno entre vosotros que al hijo que le pide pan le dé una piedra; o si le pide un pez, le dé una culebra?
Si, pues, vosotros, siendo malos, sabéis dar cosas buenas a vuestros hijos, ¡cuánto más vuestro Padre que está en los cielos dará cosas buenas a los que se las pidan!
«Por tanto, todo cuanto queráis que os hagan los hombres, hacédselo también vosotros a ellos; porque ésta es la Ley y los Profetas.
Mt 7, 7-12
REFLEXIÓN BREVE
Hablamos siempre de la fe, en qué lugar podremos hallarla, nos hacemos cuestiones y preguntas algunas veces sin respuesta.
Escuchaba el otro día el testimonio de un hombre que afirmaba encontrar su fe a los 50 años y explicaba que la halló ayudando al prójimo.
Y es que nos pasamos la vida buscando dicha fe y es necesario pararnos a pensar que lo primero que debemos hacer es cultivarla y eso se hace cada día a través de la oración porque poco a poco vamos haciendo que crezca en nuestro interior y sea eficaz, pero sino llevamos a cabo las obras difícilmente seguirá con la llama encendida.
Nos decía Jesús que la fe siempre va ligada a las obras, y creo que es más bien un proceso, comenzar con oraciones donde estar cerca del Padre, posicionarnos frente a él y hacer que florezca a partir de las buenas acciones con los demás, porque es ahí donde cobra sentido.
Así que contribuyamos con nuestra oración y con las obras a que esa luz esté en cada uno de nosotros.
ORACIÓN
Jesús tal y como dijiste a tus discípulos haznos sentir que siempre estás cerca de nosotros, que tu fe llame a nuestra puerta y encienda en cada uno de nuestros corazones una luz a la que siempre acudir, a pesar de las tinieblas, que se mantenga viva por siempre.
Haz que la oración sea el camino para llegar a ti y que esté inundado de flores que crezcan después de cada obra hecha.
ENTRA EN TU INTERIOR
Ahora en este momento de reflexión, entra en tu interior y busca un momento a partir de esta música relajante para llegar al padre a partir de esta oración.
Piensa en algún momento en el que sentiste la llamada y su cercanía.
Quédate en ese momento.
¿Qué sentiste? Explora esos sentimientos y pregúntate si está a día de hoy.
ORACIÓN FINAL
No olvidemos que en este sendero al que llamamos vida tenemos estrellas en nuestros firmamentos que brillan y nos guían, pensemos en la oración como forma de llegar a ellas para que ese vínculo nunca desaparezca y siga vivo en cada uno de nuestros corazones.